21 de Marzo:
Impidamos
el avance de la Xenofobia y del Racismo
En el Día Mundial
contra el Racismo, constatamos el
aumento de la xenofobia social en un contexto de elevado paro y crisis
económica, el peligro de deshumanización
de las políticas migratorias, el crecimiento de las organizaciones racistas y
neonazis en todo el continente y el alarmante avance del populismo xenófobo y
del discurso de odio ante las próximas elecciones europeas. Movimiento contra
la Intolerancia pide a las instituciones que pongan fin a su indolencia al
respecto, impulsando medidas y políticas eficaces frente a la xenofobia, que
proteja a las víctimas de odio racista y de delitos de intolerancia; reclama a los líderes europeos reforzar la
legislación y que pongan en práctica medidas efectivas de protección de los
colectivos vulnerables.
El aumento de la
xenofobia social en España, como en
Europa, es un hecho y no admite duda alguna. En un contexto de crisis económica
y elevado paro, la intolerancia xenófoba
encuentra su mejor oportunidad y pese a los esfuerzos que se realizan,
especialmente la sociedad civil, la demagogia, el prejuicio, el odio y la discriminación, el populismo y las ofertas
políticas que vulneran los derechos humanos de los inmigrantes, gitanos y otras
minorías sociales se presentan de forma abierta y arrogante. La peligrosa
deshumanización que se está
produciendo en todos los países europeos y que en España tiene su reflejo en
las fronteras alambradas con cuchillas y los trágicos sucesos donde perecieron
15 inmigrantes, en esos CIES denunciados por las instituciones internacionales
y en otras actuaciones que van desde las identificaciones por perfil racial al
retroceso en los derechos sanitarios, viene a decir poco respecto a los valores humanistas y
democráticos que fundamentan la existencia política y social de la Unión Europea.
Otro grave problema, acompañado de una indolencia
institucional inexplicable, es el crecimiento de las organizaciones racistas y
neonazis así como de sus actividades sin
la debida respuesta preventiva y punitiva. La propaganda que despliegan,
especialmente el discurso de odio en Internet, resulta muy visible y se
constatan mas de 1.500 “sites” (webs, blogs, foros, canales, redes sociales..),
complementados con una presencia ostentosa y agitadora en los fondos Ultras de
los campos de futbol, pese a existir una legislación que lo prohíbe. El discurso de odio, esa propaganda que precede a la acción, tiene consecuencias
en términos de delitos y víctimas, que aún en
nuestro país están escasamente registradas, en contraste con los 60.000
incidentes y delitos que reconoce el Reino Unido, los 10.000 que reconoce
Alemania y los 6.000 que reconoce Suecia. En España solo se reconocen unos
cientos. Las Instituciones Europeas, a través de la FRA (Agencia de Derechos
Fundamentales) insiste que el 90% de las agresiones a inmigrantes no se
denuncian, el 20 % de los subsaharianos y gitanos han sido agredidos y el 33%
de los judíos han sufrido agresiones físicas y verbales (especialmente en Europa del este), sin
olvidar la estigmatización de musulmanes, homosexuales y ataques a las personas
“sin techo”. Los delitos de odio son una realidad flagrante, criminal, que hay
que neutralizar.
Movimiento contra la
Intolerancia advierte que las próximas elecciones europeas el populismo
xenófobo, la intolerancia y el odio racista pueden obtener un resultado inquietante y reclama
intervenir para reducir el rechazo a la
diversidad y proteger a inmigrantes, gitanos, homosexuales, judíos, musulmanes
y otros colectivos víctimas de la intolerancia creciente reflejada en las
encuestas. También reclama al Gobierno el cierre de webs
racistas y xenófobas pues “lo que es
ilegal fuera de la red también lo es en Internet”, la no autorización de conciertos neonazis, la erradicación de grupos racistas en las gradas
ultras del futbol y adecuar
nuestro insuficiente Código Penal a la Decisión Marco de la Unión Europea
contra el Racismo y la Xenofobia, que aún está pendiente. Además reclama impulsar la formación de
los operadores jurídicos y fuerzas de
seguridad en materia de racismo, intolerancia y delitos de odio.