martes, 31 de enero de 2023

Homenaje a 18 bajoaragoneses víctimas del Holocausto en el Día de la Memoria

LA COMARCA

LA COMARCA- Unas 60 personas rindieron homenaje este viernes en Alcañiz a los 18 bajoaragoneses registrados como víctimas del Holocausto durante el régimen nazi. De todos ellos, 16 habían nacido en Alcañiz, mientras que los otros dos residían en la localidad hasta antes de ser deportados junto al resto a diferentes campos de concentración. Sus nombres, su historia y sobre todo su memoria fueron recordados con motivo del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las víctimas del Holocausto (27 de enero) a través de unos actos organizados por Amical de Mauthausen, asociación encargada de defender los derechos morales y materiales de las víctimas con el objetivo de que «esta parte de la historia nunca vuelva a repetirse».

El horror del totalitarismo deja una cifra en la provincia de Teruel que, en palabras de Juan Manuel Calvo, presidente de Amical, suma 170 deportados a campos de concentración nazi. De ellos, casi la mitad eran ciudadanos del Bajo Aragón Histórico. Elegir un día para conmemorar su memoria fue una decisión que Naciones Unidas tomó 18 años atrás, en 2005. Se trata de una fecha lejana si se tiene en cuenta desde una mirada del día a día, pero, históricamente hablando, esta es «todavía demasiado reciente». Más todavía si se tiene en cuenta el «grave problema de memoria que existe en España», tal y como apuntaron desde Amical de Mauthausen durante una conferencia que tuvo lugar en el Palacio Ardid como parte de los actos de homenaje. «Llevamos años de retraso en comparación a otros países de Europa. La sociedad debe esforzarse todavía más en el reconocimiento a las víctimas», afirmó Calvo.

Desde hace algunos años el Día de la Memoria coincide con un panorama sociopolítico en el que los discursos de la extrema derecha continúan ganando fuerza entre la población, especialmente la más joven. Así lo alertó Calvo, quien defendió que la difusión de las historias de estas víctimas también es un aspecto básico para evitar que estos sigan ganando peso entre la sociedad. «La prevención sigue siendo crucial, sobre todo frente a estos discursos, que nos preocupan porque nos recuerdan a lo que se podía oír en los años 30 y nos llevó al desastre como sociedad«, añadió.

Pero más que por esa prevención, contar sus historias y recordar sus nombres es una tarea necesaria para entender un dolor que se extiende incluso hasta la actualidad en muchas familias. «Son trayectorias vitales que se rompieron para siempre y eso ha perdurado en el entorno familiar, que también es víctima. Desde el mundo local no podemos olvidarlo», concluyó.